Nunca antes una pareja real había cumplido tantos años de casados. Por eso, la Reina Isabel II de Inglaterra y su marido, el duque Felipe de Edimburgo, celebraron hoy sus bodas de diamante (60 años) con una ceremonia religiosa en la Abadía de Westminster a la que fueron invitadas más de 2.000 personas, entre familiares, políticos y personalidades del país. Además, su hijo mayor, el príncipe Carlos, ha decidido agasajar a sus padres con una cena en familia y en privado en su residencia.A pesar de la lluvia que hoy caía sobre Londres, la familia real británica mostraba su cara más alegre y sonriente en un día tan especial. Numerosos curiosos se acercaron hasta el templo en donde el arzobispo de Canterbury, Rowan Williams, que ofició la ceremonia, dedicaba la homilía al matrimonio y se refería a la soberana asegurando que llegar a amar durante tantos años era una medalla más dentro de su papel como Reina de Inglaterra.
Durante la celebración también participó el príncipe Guillermo, nieto de Isabel II y futuro heredero de la corona inglesa, que destacó que "todos los matrimonios son un acontecimiento público" pero que "algunas parejas tienen que vivir más que otras bajo las luces de la publicidad". Por ello, explicó Guillermo, en el caso de sus abuelos no se trata sólo de un matrimonio sino "una relación entre monarca y población".
Los Windsor en su totalidad acudieron a esta ceremonia, incluida la esposa del príncipe Carlos, Camilla Parker, que estuvo sentada junto a los hijos de su marido, así como numerosos nobles alemanes emparentados con el príncipe Felipe. Del mismo modo estuvieron presentes el Primer Ministro, Gordon Brown, ex dirigentes como Margaret Tatcher o John Major, explica 'Enews' en una información recogida por Otr/press, así como la actriz inglesa Judy Dench y otras 20 parejas que se casaron el mismo día que los soberanos.
BODA EN 1947
Isabel II, por entonces una princesa de 21 años, y Felipe de Edinburgo, de 26, se casaron el 20 de noviembre de 1947, un matrimonio que no fue muy bien visto por la Casa Real británica, ya que todavía pesaba sobre los nobles alemanes su posible colaboración con Hitler. La luna de miel de los actuales monarcas fue en Malta, en donde residieron varios años (de 1949 a 1951), ya que el príncipe Felipe estuvo destinado allí durante su servicio militar. Ahora ambos volverán 60 años después, ya que, han querido regresar por su aniversario.
Entre las anécdotas del enlace está la gran austeridad con la que se celebró, a pesar de que se trataba de la futura reina de Inglaterra, pero Londres vivía una dura postguerra y, por ejemplo, la tarta de los novios fue encargada a Australia, debido a la escasez del país. Estas anécdotas pueden encontrarse en un enlace especial, dentro de la Web que la Casa Real inglesa (www.royal.gov.uk) y que se ha inaugurado con motivo de este acontecimiento. Entre otras cosas, los internautas pueden dejar su mensaje de felicitación para la longeva pareja.
